bordado callejero

Ya estoy de vuelta en Barcelona y nada mejor para celebrarlo que una mañana de bordado callejero. Nos reunimos unos cuantos para bordar con punto de cruz gigante unas vallas y aprovechando los agujeros pudimos hacer unos bordados que animaban un poco las aburridas vallas del parque.

Loly se curró unos diseños súper bonitos y pesar del frío que hacía había muchos niños y mayores que se acercaban a ver qué hacíamos. La verdad es que estamos muy contentos con el resultado y ya estamos pensando en los próximos bordados callejeros.

Si pasáis por el  parque junto a Casa Sagnier seguramente podréis ver nuestro perro salchicha, espero que os guste tanto como a nosotros!